2/04/2009

Mariposa dorada

Para Miguel y Cèline

Mariposa que has llegado a mi ventana cruzando extraños paisajes y lejanos mares; mariposa dorada que conoces el brillo de otros cielos y el eco de otros acentos; que has mirado caer copos de nieve como si fueran mariposas blancas, hermanas tuyas: ¿que milagro te impulsó a volar hasta mi ventana para acompañar mi soledad?

Fue un soplo de amor: dos ángeles te impulsaron con su lejano recuerdo y con la fuerza de su sangre que es de ellos y que es mía.

Ahora estás aquí con tus iridiscentes destellos diciéndome: ¡Vive! que, aún venciendo tiempos y distancias, el amor te acompaña.